El congloremerado de la aviación europea que forman British Airways, Vueling, Level y Air Lingus (IAG) ha comprado Air Europa en una operación a través de una de sus filiales, Iberia, por un importe de 1.000 millones de euros, según ha anunciado la compañía.
La española, que era propiedad de Globalia (José Hidalgo) recibirá en efectivo la cantidad indicada. Se espera que la operación se cierre durante la segunda mitad del 2020, una vez se hayan obtenido las preceptivas autorizaciones de los reguladores (la CNMC y la CMNV). Algo que se plantea interesante ya que como resultado de la compra, las compañías de IAG tendrán más del 70% de cuota de pasajeros en los aeropuertos españoles de Aena.
El interés estratégico de la operación se centra en la posibilidad de convertir en Madrid en un hub de transporte aéreo de referencia con destino Latinoamérica. Una decisión más que acertada ante un eventual escenario de Brexit. IAG pretende transformar la T4 del Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas en uno de los mayores de su ámbito a nivel europeo, tanto en vuelos domésticos (dentro de la UE) como internacionales, fundamentalmente con LATAM.
Con esta decisión se pretende que Madrid esté a la altura de otros aeropuertos de capitales europeas como Heathrow o Charles de Gaulle. La marca Air Europa será conservada inicialmente y la sociedad seguirá siendo un centro de ingresos autónomo dentro de Iberia, dirigida por su consejero delegado, Luis Gallego.
En principio la operación para la familia Hidalgo es óptima ya que la compañía ha sido valorada a un buen precio y habrá que esperar a ver qué resulta en materia de empleo, aunque IAG ya ha asegurado que es su intención no reducir plantillas ni acudir al tan temido ERE.
Imagen: víaempresa