Por Miguel Ortego Ruiz
El Consejo Audiovisual de Cataluña («CAC»), el equivalente, por sus funciones, a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia («CNMC») en Cataluña, ha denunciado casi 60 vídeos de YouTube en los que menores de edad («youtubers») hacen publicidad encubierta (de mas de 150 productos y marcas) dirigida a niños y adolescentes, según publica El Periódico hoy. Los hechos se han puesto en manos de la Agencia Catalana de Consumo.
Esta denuncia se suma a las medidas que ya tomara el Ministerio de Sanidad contra el portal de vídeos online para solicitar que los «influencies prescriptores» salgan de YouTube en relación a las recomendaciones de medicamentos que venían realizando youtubers y que no cumplían con la normativa publicitaria en materia de medicamentos, según publicaba Redacción Médica.
Ambos hechos demuestran como la digitalización implica que el concepto y naturaleza de «medios de comunicación» deba de ampliarse para englobar también a plataformas como YouTube y otras plataformas digitales que operan en Internet (los Prestadores de Servicios de la Sociedad de la Información, cuando se dedican al mercado de la comunicación) toda vez que realizan las mismas actividades que los medios de comunicación clásicos, si bien, por no conceptuarlos como tales, no se ven obligados a cumplir la normativa oportuna; en este caso, laLey 7/2010, de 31 de marzo, General de la Comunicación Audiovisual y la Ley 34/1988, de 11 de noviembre, General de Publicidad, realizando, por tanto, una competencia desleal así como infringiendo la protección que tales normas prescriben.
Y es que la citada normativa regula con cuidado y esmero el tipo de publicidad que se realiza en medios de comunicación, tanto de productos específicos, como los medicamentos, como de intervinieres, como en este caso los menores. Nos encontramos nuevamente ante una situación análoga a la de las plataformas de transporte como Cabify y los taxistas. Dos mundos que compiten por el mismo negocio e ingresos pero regulados de manera diferente.
Los YouTubers infantiles denunciados por el CAC, según El Periódico, los siguientes: MikelTube (cinco millones de seguidores), TeamNico (dos millones), DivertiDuay (dos millones), PINO (1,5 millones de seguidores), LeoTube (1,3 millones), The Crazy Haacks (3,5 millones), Las Aventuras de Dani y Evan (1,7 millones de seguidores)o Las Ratitas (18 millones de seguidores), Abrelo Toys, El mundo de Clodett, Karina & Marina, La Diversión de Martina, Lady Pecas, Los juguetes de Arantxa y Sílvia Sánchez.
Dentro de los productos publicitados por los menores, destacan los juguetes, el ‘merchandising’ del ‘youtuber’, los artículos de moda y las consolas y los videojuegos (en su gran mayoría violentos).
El CAC es el regulador del mercado de la comunicación audiovisual en Cataluña, el único a nivel autonómico junto con el de Andalucía, creado tras la reforma de la Ley General de la Comunicación Audiovisual que preveía la creación de un Consejo Estatal de Medios Audiovisuales («CEMA») a nivel nacional, pero que por la crisis no salió adelante y las funciones previstas las asumió la CNMC.
Desde aquí hacemos un llamamiento a los Poderes Públicos y reguladores para que tanto a nivel nacional como europeo se regulen el sector audiovisual de manera equitativa e igualitaria para generar riqueza e inversión y que, de una vez por todas, se reconozca la naturaleza jurídica de «medio de comunicación» de numerosas plataformas digitales como YouTube, Facebook, Instagram y otros operadores digitales que compiten, sin lealtad, por el mismo mercado y los mismos ingresos que Televisiones, diarios, revistas o radio.
Imagen: El Diario