Esta es la principal conclusión que se obtiene de la reciente publicación de dos Directivas por parte de la Unión Europea («UE») en materia de Derecho de sociedades y transformaciones, fusiones y escisiones transfronterizas. Las dos directivas en cuestión son las Directivas (UE) 2019/2121 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de noviembre de 2019 (UE) y la Directiva 2017/1132. La primera, la que acaba de publicar la UE, es ampliatoria de la segunda y deberá transponerse a Derecho español no más tarde del 31 de enero de 2023.
La nueva Directiva versa sobre transformaciones, fusiones y escisiones transfronterizas que conllevan la formación de nuevas sociedades y tiene como misión fundamental armonizar la protección de trabajadores, acreedores y socios minoritarios. Fruto de las recientes sentencias europeas en la materia, sigue la misma línea que éstas, cuales son el fomento del crecimiento económico, la competencia efectiva y la productividad, al tiempo que determina que un mercado interior sin fronteras interiores para las sociedades debe conciliarse también con otros objetivos de la integración europea, como la protección social.
Sin embargo, dada su especial complejidad, la Directiva no aborda las escisiones transfronterizas en las que una sociedad transmite su activo y pasivo a una o varias sociedades preexistentes. Tampoco se aplicará a las sociedades en liquidación que hayan comenzado la distribución de sus activos
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